La industria espacial ha sufrido un cambio de paradigma respecto al enfoque en servicios y tecnología de acceso al espacio. En los últimos 10 años se experimentó una transición de un enfoque puramente estratégico estatal a un enfoque comercial, potenciado por la apertura de nuevas tecnologías de fabricación, cuyo uso se ha extendido en la industria. Argentina aprobó en el año 2022 el nuevo programa ISCUL (Inyector Satelital de Cargas Útiles Livianas) de la CONAE con el objetivo de desarrollar las tecnologías necesarias para contar con un lanzador operativo en el año 2030. En el marco de este programa, se desarrollan vehículos experimentales como plataforma de prueba de distintos sistemas y tecnologías para la fabricación. En este contexto, se trabaja en el desarrollo de procesos de fabricación de estructuras de aluminio por Friction Stir Welding, como tecnología habilitante para el acceso al espacio. VENG, principal contratista de la CONAE para el programa ISCUL, está encargada del desarrollo de estas estructuras en aluminio de uso espacial, soldados íntegramente por FSW, bajo procesos calificados. Desde mediados de 2021 VENG trabaja en este proyecto que incluye el desarrollo y fabricación de cada uno de los componentes, desarrollo y calificación de cada procedimiento de soldadura, producción y ensayo de prototipos. Actualmente, VENG se encuentra cerrando el primer prototipo soldado con procedimientos y operadores calificados bajo norma AWS. El trabajo aquí presentado pretende exponer los desarrollos realizados en FSW y desafíos encontrados para la aplicación de esta tecnología en estructuras aeroespaciales de aluminio de espesor delgado.